martes, 2 de agosto de 2016

Bebe

Óleo sobre lienzo, aguas de Guadiela al paso del Solan de Cabras
Delia Martín

Viajero de labio ardiente:
si es que la sed te mata,
¡ah! beberás solamente
sin jarra de oro, ni plata;

Pues que mi copa perdida,
aun no devuelve la suerte
porque no bebas la Vida,
que es el agua de la muerte.

Es agua pura, mi hermano
te ofrezco, tan simplemente,
a beber de la surgente
con el hueco de tu mano.

Y sentirás en la boca
como un sabor infinito,
cuando tu pobre alma loca
se te escape con un grito,

grito de sed que se atreve
llamar las aguas del cielo:
sed insaciable de anhelo,
que es más cruel, ¡pero... bebe!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario